Negarse parece a simple vista sencillo, pero nada más lejos de la realidad, una negación puede cerrar muchas puertas ya que un "No" rotundo se toma como un imperativo sin condición.
Es indispensable aportar la razón por la cual expresas esa negación, con ello conseguirás que tu posición llegue a ser aceptada.
Ganar no siempre es lo importante y negarte para no aceptar la decisión u opinión del otro no es una solución.
Atención con tu gesticulación, tu comunicación no verbal, es muy importante a la hora de exponer tu opinión y más cuando debes tratar de convencer a alguien que va con la negativa por delante.
Recuerda negarse a algo no implica una falta de interés.
"Dos negaciones afirman, pero tres confirman"